Con la propuesta de que cada uno comente a sus compañeros cómo está conformada su familia, comenzó esta secuencia que tuvo como objetivo reconocer el valor de las mismas, más allá de cómo esté conformada.

El recuerdo y la reflexión sobre los momentos que vivieron con las personas que identificaron como “sus familiares”, les permitió reconocer los valores esenciales y su función primordial: contener, alentar, consolar, aconsejar, ayudar, y enseñarles a elegir siempre el mejor camino.

Después de esta reflexión, los alumnos de 1er grado escribieron, en los corazones un texto con el título: “A mi familia le quiero decir…”

Lo hicieron poniendo en la tarea mucho cariño y emoción.