Como es tradición, para cerrar el año pensamos una dinámica emocional para compartir con toda la comunidad educativa. Generalmente se hace en la última reunión del año, pero esta vez lo quisimos hacer distinto. Es por esta razón que pensamos en utilizar un espacio de uso común, como es la sala de profesores en el 3er piso, para que sea el escenario de esta actividad.

Allí intervenimos las paredes dejando pequeños sobres con los nombres de todos los que conforman el Colegio. Por razones de organización los dividimos por categorías y niveles: personal de ordenanza; aquellos que realizan varias tareas en diferentes áreas; las maestras de Jardín y Primaria y los profes de Secundaria y Educación Física.

Además apilamos varios papeles y biromes para que cualquiera pueda dejar un mensaje positivo a su par, agradeciéndole por una cuestión en particular o bien deseándole felices fiestas.

El fin de año siempre sirve como balance, y muchas veces el cansancio se hace insostenible a esta altura del año, por eso un mensaje alentador y que saque una sonrisa siempre es un aliciente.