Desde que comenzó el año los alumnos están desarrollando las propuestas de trabajo planteadas por sus docentes. La virtualidad no quebró este esquema y, a través de instancias sincrónicas y asincrónicas, los profesores se mantuvieron en contacto con cada uno de ellos. Los chicos trabajaron, estudiaron, desarrollaron capacidades y crecieron muchísimo.

Ahora es tiempo de hacer un alto en el camino y evaluar los progresos, para así poder:

  • Dimensionar el desempeño de los estudiantes: qué aprendieron y qué necesitan reforzar
  • Analizar la propuesta de cada asignatura
  • Tomar decisiones para plantear el nuevo período

La información que surja del análisis estos datos es crucial para el proceso educativo y la mejora continúa del servicio escolar. Evaluar no se reduce a controlar o acreditar conocimiento, también permite al alumno tomar conciencia respecto de su propio aprendizaje y al docente, sobre su enseñanza. Es una herramienta indispensable para seguir creciendo juntos.

Una vez más, confiamos en el rol de las familias como acompañantes y sostén emocional de los alumnos. Su compromiso nos permitió llegar al escenario en el que nos encontramos hoy, con una altísima participación. ¡Gracias nuevamente por caminar con nosotros!