Los alumnos de 1er grado aprendieron a clasificar semillas de la siguiente forma: las observaron, definieron sus formas, las tocaron y probaron su consistencia y dureza, si se podían separar en partes o no, si se pueden comer o no. Discutieron sus opiniones en grupo y luego las clasificaron según: formas, color, dureza, y si eran comestibles o no.